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Para qué sirven los guantes de seguridad

Silvia Bernal Pérez
Silvia Bernal Pérez | Agente de Atención al Cliente
25/04/2022 | Actualizado: 09/04/2024 25/04/2022
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Para qué sirven los guantes de seguridad
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Uno de cada 3 accidentes laborales afecta a las manos de los trabajadores, y de ellos cerca del 70% ocurre cuando estos no llevan guantes de protección o cuando se utilizan los guantes incorrectos. En Prolaboral queremos guiarte para que puedas hacer una correcta elección de los elementos necesarios en la protección de tus manos.

¿Por qué son esenciales los guantes de seguridad?

Los guantes de seguridad son una pieza fundamental en el equipamiento de protección personal en una amplia gama de entornos laborales. Su importancia radica en su capacidad para proteger las manos de lesiones, contaminación y exposición a sustancias peligrosas. En una variedad de industrias, desde la construcción hasta la sanidad, los guantes de seguridad desempeñan un papel vital en la prevención de accidentes y la promoción de un ambiente laboral seguro. Por eso, la protección de manos debe realizarse mediante el uso de guantes, manguitos, guantes parciales o cualquier elemento que sirva como barrera de protección, es decir, que cubra la mano con el fin de proporcionar seguridad frente a un riesgo específico.

Además de su función protectora, los guantes de seguridad también pueden mejorar la destreza y el agarre, lo que contribuye a la eficiencia y comodidad del trabajador en diversas tareas. Al elegir los guantes adecuados para cada tarea específica, se puede garantizar que no solo se cumplan los requisitos de seguridad, sino también que se mantenga la comodidad y la funcionalidad para realizar el trabajo de manera efectiva.

Beneficios clave de usar guantes de seguridad

El uso de guantes de seguridad conlleva una serie de beneficios directos que van más allá de la simple protección de las manos. Estos beneficios no solo impactan en la seguridad y el bienestar del trabajador, sino que también pueden tener efectos positivos en la productividad y la calidad del trabajo realizado.

  • Protección contra lesiones y enfermedades. El beneficio más obvio de usar guantes de seguridad es la protección contra lesiones en las manos. Esto incluye cortes, abrasiones, quemaduras y punciones, así como la prevención de enfermedades causadas por la exposición a sustancias químicas o biológicas. Al reducir el riesgo de lesiones y enfermedades, los guantes ayudan a mantener a los trabajadores sanos y seguros en el lugar de trabajo.
  • Reducción del riesgo de contaminación. En industrias como la alimentaria, farmacéutica y química, la contaminación cruzada puede tener consecuencias graves en términos de salud pública y seguridad del producto. El uso de guantes de seguridad ayuda a prevenir la contaminación al proporcionar una barrera entre las manos del trabajador y los materiales o productos manipulados. Esto es crucial para mantener la calidad y la integridad de los productos, así como para proteger la salud de los consumidores.
  • Mejora de la destreza y el agarre. Aunque los guantes están diseñados principalmente para proteger, muchos tipos de guantes de seguridad también están diseñados para mejorar la destreza y el agarre. Los guantes con recubrimientos especiales, por ejemplo, pueden proporcionar un mejor agarre en superficies resbaladizas o aceitosas, reduciendo el riesgo de accidentes.

Comprendiendo los guantes de seguridad

Antes de seleccionar los guantes de seguridad adecuados para una tarea específica, es fundamental comprender los diferentes tipos disponibles en el mercado y sus respectivas características. Esta sección educativa sobre guantes de seguridad proporcionará una visión general de los aspectos clave que los trabajadores y empleadores deben tener en cuenta al elegir el equipo de protección adecuado, además de considerar las actividades reflejadas en la Fundación para la Prevención de Riesgos Laborales para la mejora de las condiciones de seguridad y salud en el trabajo.

En primer lugar, es importante reconocer que no todos los guantes de seguridad son iguales. Existen una amplia variedad de materiales, diseños y características que los hacen adecuados para diferentes aplicaciones y entornos laborales. Desde guantes de protección química hasta guantes anticorte para trabajos de alto riesgo, cada tipo de guante está diseñado para proporcionar protección específica según los riesgos presentes en la tarea en cuestión. Además, es esencial considerar factores como el ajuste, la flexibilidad y la sensibilidad táctil al elegir guantes de seguridad. Un guante que no se ajusta correctamente o que limita la movilidad de las manos puede afectar negativamente la comodidad y la capacidad de realizar tareas con precisión. Por lo tanto, es importante encontrar un equilibrio entre protección y funcionalidad para garantizar que los trabajadores puedan realizar sus tareas de manera segura y eficiente. Además de entender las características de los guantes de seguridad, también es importante conocer las normativas y estándares aplicables en cada industria, que podrás comprobar en la Asociación Española de Normalización (UNE). Esto incluye regulaciones específicas sobre el uso de guantes en determinadas situaciones, así como estándares de calidad y rendimiento que los guantes deben cumplir para garantizar su eficacia en la protección de los trabajadores.

Materiales de fabricación y clasificación

Los guantes de seguridad se fabrican utilizando una amplia variedad de materiales, cada uno con propiedades específicas diseñadas para proteger contra diferentes tipos de riesgos en el lugar de trabajo. La clasificación de los guantes según su material se basa principalmente en las características de protección que ofrecen y en los entornos laborales para los que son más adecuados.

  • Piel y cuero. Los guantes de piel y cuero son conocidos por su durabilidad y resistencia a la abrasión. Están fabricados con cuero natural, cuero sintético o una combinación de ambos. Se clasifican como guantes mecánicos y son ideales para trabajos que implican manipulación de objetos ásperos, como en la industria de la construcción, la carpintería y la jardinería. 

  • Látex. Los guantes de látex son elásticos y ofrecen una buena sensibilidad táctil, lo que los hace ideales para aplicaciones médicas y de laboratorio. Se clasifican como guantes de protección química y biológica y son efectivos para proteger contra salpicaduras de líquidos y contaminantes biológicos. Sin embargo, algunas personas pueden tener alergias al látex, por lo que se recomienda utilizar alternativas como guantes de nitrilo o vinilo.

  • Nitrilo. Los guantes de nitrilo son una alternativa para aquellos con alergias al látex. Son resistentes a una amplia gama de productos químicos y tienen una buena resistencia a la perforación. Se clasifican como guantes de protección química y son ampliamente utilizados en la industria médica, química y de procesamiento de alimentos. 

  • Vinilo. Los guantes de vinilo son una opción económica y están hechos de resina de PVC. Son menos elásticos que los guantes de látex o nitrilo y ofrecen una protección limitada contra productos químicos y perforaciones. Se clasifican como guantes de protección general y son adecuados para tareas de limpieza, manipulación de alimentos y aplicaciones de bajo riesgo.

  • Neopreno. Los guantes de neopreno son resistentes a una amplia variedad de productos químicos y son altamente flexibles, lo que los hace adecuados para aplicaciones que requieren una buena destreza manual y protección contra productos químicos agresivos. 

  • PVC. Los guantes de PVC están hechos de policloruro de vinilo y ofrecen una buena resistencia a una amplia gama de productos químicos, así como a la abrasión y la perforación.

Clasificación por categorías: I, II, y III

Los guantes de seguridad se clasifican en tres categorías distintas según su nivel de protección y el tipo de riesgos contra los que ofrecen defensa. 

  • Categoría I: Protección mínima. Esta categoría abarca los guantes de seguridad diseñados para proteger contra riesgos mínimos. Estos guantes están destinados a situaciones donde el daño potencial para la salud o la seguridad es bajo y fácilmente detectable por el usuario. Ejemplos de riesgos mínimos incluyen irritación cutánea leve, abrasión o exposición a condiciones atmosféricas benignas. Los guantes de esta categoría deben llevar el marcado CE, que indica que el fabricante ha realizado una evaluación de conformidad según los requisitos esenciales de la legislación.
  • Categoría II: Protección intermedia. Los guantes de esta categoría están diseñados para proteger contra riesgos que no están cubiertos por las categorías I o III. Esto incluye riesgos que pueden causar lesiones graves o incluso la muerte, pero que no son inmediatamente peligrosos. Los guantes de categoría II deben someterse a un proceso de evaluación de la conformidad más riguroso, que puede implicar pruebas de laboratorio y la intervención de un organismo notificado. Los riesgos que pueden estar cubiertos por los guantes de categoría II incluyen cortes, abrasiones, productos químicos y calor moderado.
  • Categoría III: Protección máxima. Esta categoría engloba los guantes de seguridad diseñados para proteger contra riesgos que pueden causar daños graves o incluso la muerte, y cuya consecuencia no es inmediatamente aparente. Estos guantes están destinados a situaciones de alto riesgo, como manipulación de productos químicos corrosivos, contacto con objetos cortantes o manipulación de equipos eléctricos bajo tensión. Los guantes de categoría III están sujetos a los más estrictos controles de calidad y deben ser examinados y certificados por un organismo notificado. Además, el fabricante debe garantizar un sistema de aseguramiento de calidad para garantizar la consistencia en la fabricación de los guantes.

Tipos de guantes de seguridad y sus funciones

Existen diversos tipos de guantes diseñados para proteger contra diferentes riesgos y cumplir con diversas funciones específicas. Es importante seleccionar el tipo de guante adecuado según los riesgos específicos presentes en el lugar de trabajo y las necesidades individuales de protección de los trabajadores. Además, se deben considerar otros factores como el ajuste, la comodidad y la sensibilidad táctil al elegir los guantes de seguridad adecuados. A continuación, te presentamos algunos de los tipos más comunes de guantes de seguridad y sus respectivas funciones.

Guantes de uso general para protección básica

El primer grupo está formado por los guantes de uso general. Estos, a diferencia de lo que puede parecer, no son útiles para todo. Más bien se denominan guantes de uso general porque protegen las manos frente a diferentes riesgos en niveles moderados.

Son versátiles y pueden ser utilizados en una variedad de aplicaciones, como el bricolaje, la jardinería y los trabajos mecánicos, entre otros. Suelen estar fabricados con materiales ligeros y flexibles, como poliuretano, poliéster, nylon o una combinación de estos materiales. Estos materiales proporcionan comodidad y permiten una buena flexibilidad y destreza manual, lo que es esencial para realizar tareas que requieren manipulación precisa.

Guantes para riesgos mecánicos, térmicos, químicos, y más

Los guantes de seguridad están diseñados para proporcionar protección contra una variedad de riesgos, incluyendo riesgos mecánicos, térmicos, químicos y más.

Los guantes para riesgos mecánicos están diseñados para proteger contra riesgos como cortes, abrasiones, perforaciones y rasgaduras causadas por objetos afilados, ásperos o punzantes. Por lo general, están fabricados con materiales resistentes, como cuero, kevlar, fibras de vidrio o nylon, y pueden incluir recubrimientos adicionales para mejorar la resistencia al desgaste y al corte. En el caso de los guantes térmicos, están diseñados para proteger contra riesgos térmicos, como altas o bajas temperaturas, llamas, calor radiante o frío intenso. Están fabricados con materiales aislantes, como cuero, nomex o fibras de aramida, y pueden incluir características adicionales como refuerzos en áreas expuestas al calor o al frío. En cuanto a los guantes para riesgos químicos, se encargan de proteger contra la exposición a productos químicos corrosivos, irritantes o tóxicos que pueden causar quemaduras, irritación de la piel o intoxicación. Están fabricados con materiales resistentes a la penetración química, como látex, nitrilo, neopreno o PVC, y pueden incluir forros internos para proporcionar una barrera adicional contra la permeación química.

Especialidades: eléctricos, anti-vibración y para soldadura

Además de los guantes de seguridad estándar que ofrecen protección contra una variedad de riesgos generales, existen guantes especializados diseñados para proteger contra riesgos específicos en entornos laborales particulares. Estos guantes están diseñados con características y materiales específicos para proporcionar una protección efectiva en situaciones donde los riesgos son más específicos y potencialmente más peligrosos.

  • Guantes eléctricos. Los guantes eléctricos, o guantes dieléctricos, están diseñados para proteger contra riesgos eléctricos, como descargas eléctricas, arcos eléctricos o corrientes eléctricas. Están fabricados con materiales dieléctricos, como caucho, neopreno o vinilo, que tienen una alta resistencia a la electricidad y proporcionan aislamiento eléctrico para el usuario. Estos guantes dieléctricos se utilizan en trabajos donde hay exposición a sistemas eléctricos energizados, como electricistas, linieros y técnicos de mantenimiento.
  • Guantes anti-vibración. Los guantes anti-vibración ayudan a reducir la transmisión de vibraciones y impactos a las manos durante el uso de herramientas y maquinaria vibrante. Están fabricados con materiales acolchados y amortiguadores, como gel de silicona, espuma viscoelástica o materiales absorbentes de impactos, que ayudan a reducir la fatiga y el riesgo de lesiones por vibración. Estos guantes son especialmente útiles en industrias como la construcción, la fabricación y la industria automotriz.
  • Guantes para soldadura. Los guantes para soldadura están diseñados específicamente para proteger contra los riesgos asociados con la soldadura, como el calor extremo, las salpicaduras de metal fundido y las chispas. Están fabricados con materiales resistentes al calor, como cuero de vaca, cuero de cabra o kevlar, y pueden incluir refuerzos adicionales en áreas expuestas al calor y al desgaste. Estos guantes suelen tener un diseño largo que cubre parte del antebrazo para proporcionar una protección adicional. Se utilizan en industrias donde se realiza soldadura, como la metalurgia, la construcción y la fabricación de automóviles.

Características importantes de los guantes de seguridad

Cuando se seleccionan guantes de seguridad, es crucial considerar una serie de características importantes que aseguren la protección efectiva de las manos en el lugar de trabajo. Estas características no solo garantizan la seguridad de los trabajadores, sino que también influyen en su comodidad y rendimiento en diversas tareas.

  • Adecuación al riesgo. Los guantes deben ser seleccionados específicamente para proteger contra los riesgos presentes en el lugar de trabajo. Esto significa considerar factores como el tipo de riesgo (mecánico, químico, térmico, etc.), la naturaleza de las tareas realizadas y la duración de la exposición a los riesgos.
  • Material adecuado. El material del que están hechos los guantes es fundamental para determinar su capacidad de protección y comodidad. Los materiales comunes incluyen cuero, nitrilo, neopreno, látex, kevlar y diferentes tipos de tejidos. Es importante seleccionar un material que sea adecuado para el tipo de riesgo al que se enfrenta el trabajador.
  • Ajuste y comodidad. Los guantes deben ajustarse correctamente a las manos del usuario para garantizar una protección efectiva y permitir un movimiento cómodo y libre. Un ajuste adecuado también contribuye a reducir la fatiga del usuario y aumentar la aceptación del uso de los guantes.
  • Destreza y sensibilidad táctil. Es crucial que los guantes permitan al usuario realizar tareas con precisión y sensibilidad táctil. Los guantes demasiado gruesos o rígidos pueden afectar negativamente la destreza y la capacidad de manipulación de objetos, lo que puede aumentar el riesgo de accidentes.
  • Resistencia y durabilidad. Los guantes deben ser lo suficientemente resistentes como para soportar el desgaste diario y las exigencias del entorno laboral. Esto incluye resistencia a la abrasión, al desgarro, a la perforación y a la degradación causada por productos químicos o exposición al calor.
  • Transpirabilidad: Los guantes deben permitir la circulación del aire para evitar la acumulación de calor y sudor en las manos del usuario. La transpirabilidad es especialmente importante en entornos de trabajo calurosos o durante actividades físicas intensas.

Ajuste, materiales resistentes y flexibilidad

El ajuste adecuado y la elección de materiales resistentes y flexibles son aspectos fundamentales en la selección de guantes de seguridad. Estas características no solo garantizan la comodidad del usuario, sino que también contribuyen significativamente a la efectividad de la protección ofrecida por los guantes.

Un ajuste adecuado es esencial para garantizar que los guantes de seguridad se mantengan en su lugar durante toda la jornada laboral. Un guante que sea demasiado holgado puede deslizarse o engancharse en maquinaria en movimiento, mientras que uno demasiado ajustado puede causar incomodidad, restricción de movimiento y fatiga en las manos. Del mismo modo, los materiales utilizados en la fabricación de los guantes determinan su capacidad para proteger las manos contra los diferentes riesgos presentes en el entorno laboral. Materiales como el cuero, el nitrilo, el neopreno y el kevlar ofrecen resistencia a la abrasión, al corte, a los productos químicos y al calor, entre otros riesgos. Además, la flexibilidad de los guantes es esencial para permitir el movimiento natural de las manos y la destreza necesaria para realizar tareas con precisión. Los guantes demasiado rígidos pueden dificultar la manipulación de objetos y reducir la sensibilidad táctil, lo que aumenta el riesgo de accidentes.

Resistencia a productos químicos y ergonomía

La resistencia a productos químicos y la ergonomía son aspectos esenciales a considerar al elegir guantes de seguridad adecuados para entornos laborales donde existe exposición a sustancias químicas peligrosas. Estos dos elementos no solo garantizan la protección efectiva de las manos contra la corrosión y la irritación química, sino que también contribuyen significativamente al confort y la productividad del usuario.

Los guantes de seguridad deben ser capaces de resistir la permeación y la degradación causada por una amplia gama de productos químicos agresivos. Los materiales utilizados en la fabricación de estos guantes, como el nitrilo, el neopreno, el PVC y el viton, ofrecen diferentes niveles de resistencia química. Es crucial seleccionar guantes que estén fabricados con materiales adecuados para proteger contra los productos químicos específicos presentes en el entorno laboral. La resistencia química adecuada garantiza que las manos del usuario estén protegidas de posibles quemaduras, irritaciones o lesiones causadas por la exposición a sustancias peligrosas.

En cuanto a la ergonomía, se refiere al diseño de los guantes para adaptarse cómodamente a las manos del usuario y permitir un movimiento natural y libre. Un diseño ergonómico no solo mejora el confort del usuario, sino que también reduce la fatiga y aumenta la productividad durante largos periodos de uso. Los guantes ergonómicos suelen tener costuras mínimas en áreas de fricción, puños ajustables para un ajuste seguro y formas anatómicas que imitan la curvatura natural de las manos. La ergonomía adecuada también puede incluir características adicionales como revestimientos internos suaves para mayor comodidad y forros que absorben la humedad para mantener las manos secas.

Uso correcto y mantenimiento de los guantes de seguridad

Antes de cada uso, se deben inspeccionar los guantes en busca de signos de desgaste, daños o deterioro. Esto incluye verificar costuras deshilachadas, agujeros, grietas, hinchazón, decoloración o endurecimiento del material. Y, después de cada uso, los guantes deben limpiarse adecuadamente para eliminar la suciedad, los contaminantes y los residuos químicos.

Es crucial seleccionar guantes que sean apropiados para los riesgos específicos presentes en el lugar de trabajo. Deben colocarse correctamente en las manos para garantizar una protección efectiva. Asegúrate de que estén bien ajustados y que cubran completamente las manos y las muñecas. En cuanto a los puños, deben colocarse por encima de las mangas de la ropa para evitar la entrada de sustancias peligrosas. En definitiva, los guantes de seguridad tienen una vida útil limitada y deben ser reemplazados regularmente, incluso si no muestran signos visibles de desgaste.

¿Cómo usar los guantes de seguridad correctamente?

El uso adecuado de los guantes de seguridad es fundamental para garantizar una protección efectiva de las manos en el lugar de trabajo.

  • Selecciona los guantes adecuados. Antes de usar los guantes, asegúrate de seleccionar el tipo correcto de guantes que proporcionen la protección necesaria contra los riesgos específicos presentes en tu entorno laboral, ya sean riesgos mecánicos, químicos, térmicos u otros.
  • Lávate las manos. Lávate las manos con agua y jabón para eliminar la suciedad y los contaminantes que puedan estar presentes en la piel. Sécalas completamente antes de colocarte los guantes.
  • Inspecciona los guantes. Inspecciónalos visualmente en busca de cualquier daño, como agujeros, grietas, desgarros o decoloración. Si encuentras algún daño, no uses los guantes y busca un par nuevo.
  • Colócate los guantes correctamente. Coloca cada guante en la mano correspondiente asegurándote de que estén bien ajustados y cubran completamente las manos y las muñecas. Estira los guantes suavemente para asegurarte de que estén correctamente colocados.
  • Ajusta los puños. Asegúrate de que los puños de los guantes estén colocados por encima de las mangas de tu ropa para evitar que entre cualquier sustancia peligrosa en los guantes.
  • Evita tocarte la cara. Evita tocarte la cara, los ojos, la nariz o la boca mientras uses los guantes, ya que pueden haber recogido contaminantes durante su uso.
  • Retira los guantes correctamente. Para retirar los guantes, agarra la parte exterior del guante cerca de la muñeca con la otra mano y tira hacia abajo y hacia afuera, volteando el guante del revés. Luego, con la mano desnuda, desliza tus dedos debajo del borde del guante en la muñeca y quítatelo sin tocar la parte exterior.

Consejos para el mantenimiento y la higiene

Después de cada uso, los guantes deben limpiarse adecuadamente para eliminar la suciedad, los contaminantes y los residuos químicos que puedan haberse acumulado en la superficie. Esto es especialmente importante si los guantes están en contacto con sustancias peligrosas o si se usan en entornos sucios. Utiliza agua tibia y jabón suave para limpiar los guantes y asegúrate de frotar suavemente todas las áreas, incluidas las palmas y los dedos. Evita usar productos químicos agresivos que puedan dañar el material de los guantes. Después de limpiar los guantes, es importante secarlos completamente antes de guardarlos. Cuelga los guantes en un lugar bien ventilado y a la sombra para que se sequen naturalmente. Evita exponer los guantes a la luz solar directa o a fuentes de calor, ya que esto puede dañar el material y reducir su vida útil.

Si los guantes están en contacto con sustancias potencialmente contaminadas o si se usan en entornos donde se requiere una mayor higiene, es importante desinfectarlos adecuadamente. Utiliza desinfectantes apropiados para el tipo de material de los guantes y sigue las instrucciones del fabricante para una desinfección efectiva y segura. Si estás utilizando guantes reutilizables, es importante mantenerlos en buen estado para garantizar su durabilidad y efectividad a lo largo del tiempo. Inspecciona regularmente los guantes en busca de signos de desgaste, daño o deterioro y reemplázalos según sea necesario. Si es posible, sigue las instrucciones del fabricante para el mantenimiento y la reparación de los guantes. Cuando no estén en uso, los guantes deben almacenarse en un lugar limpio, seco y bien ventilado para evitar la acumulación de humedad y la proliferación de bacterias u hongos. Evita doblar o aplastar los guantes durante el almacenamiento, ya que esto puede dañar su forma y estructura.

Caducidad y reemplazo de guantes según material

Los guantes de seguridad, al igual que otros equipos de protección personal, tienen una vida útil limitada y deben ser reemplazados regularmente para garantizar su eficacia en la protección de las manos. La duración de los guantes puede variar según el material del que estén hechos y los riesgos específicos a los que estén expuestos. Por ejemplo, los guantes de látex y nitrilo generalmente tienen una vida útil de aproximadamente 3 a 5 años si se almacenan adecuadamente en un lugar fresco y seco, lejos de la luz solar directa y fuentes de calor, al igual que los de vinilo. Sin embargo, los guantes de neopreno y PVC tienden a ser más duraderos que los guantes de látex, nitrilo o vinilo y pueden tener una vida útil de 5 a 8 años si se cuidan adecuadamente.

Es importante recordar que estos son solo lineamientos generales y que la vida útil y la necesidad de reemplazo de los guantes pueden variar según el uso específico y los riesgos a los que estén expuestos. Siempre debes seguir las recomendaciones del fabricante y realizar inspecciones regulares para asegurarte de que los guantes estén en buenas condiciones y proporcionen la protección adecuada a tus manos.

Recomendaciones para elegir los guantes de seguridad adecuados

Al seguir una serie de recomendaciones al elegir los guantes de seguridad adecuados, puedes garantizar una protección efectiva de las manos y reducir el riesgo de lesiones en el lugar de trabajo. Recuerda que la seguridad es una prioridad y que seleccionar los guantes correctos es una parte importante de mantener un entorno de trabajo seguro y saludable.

  • Evalúa los riesgos. Antes de seleccionar los guantes, realiza una evaluación completa de los riesgos presentes en el entorno laboral. Identifica los posibles peligros, como riesgos mecánicos, químicos, térmicos u otros, para determinar qué tipo de protección se necesita.
  • Selecciona el material adecuado. Elige guantes fabricados con materiales que sean adecuados para los riesgos específicos presentes en el entorno laboral. Los materiales comunes incluyen látex, nitrilo, neopreno, PVC, cuero y tejidos resistentes al calor. Considera la resistencia química, la resistencia al corte, la resistencia al calor y otras propiedades del material al tomar tu decisión.
  • Ajuste y comodidad. Es importante seleccionar guantes que se ajusten correctamente a las manos del usuario y sean cómodos de usar durante largos períodos. Un ajuste adecuado garantiza una protección efectiva y evita la restricción del movimiento o la fatiga del usuario. Considera características como puños ajustables, diseño ergonómico y materiales flexibles para garantizar un ajuste cómodo.
  • Verifica las certificaciones y estándares. Asegúrate de que los guantes cumplan con las normas y regulaciones de seguridad aplicables en tu área o industria. Busca guantes que estén certificados por organizaciones reconocidas y que cumplan con estándares de calidad como la norma EN388 para guantes de protección mecánica o la norma EN374 para guantes de protección química.

Conclusión: La importancia de la protección de las manos en el ambiente laboral

El uso adecuado de guantes de seguridad es esencial para proteger las manos de los trabajadores contra lesiones y enfermedades en el lugar de trabajo. Priorizar la protección de las manos no solo beneficia a los empleados al reducir el riesgo de lesiones, sino que también contribuye a la productividad, al cumplimiento normativo y a la creación de una cultura de seguridad en el ambiente laboral.

Por lo tanto, invertir en guantes de seguridad de calidad y promover su uso adecuado es una medida fundamental para garantizar un entorno de trabajo seguro y saludable para todos.

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